¿Miguel, activo para Chuao? Bueno me pondré las pilas de una vez a estudiar, ya estoy pasado de vago. Ahorita estudiaré semiología, pero full, luego repasaré fisiopatología para no ir tan forzado al examen ¡Ah sí! Tengo que estudiar para el seminario de tórax también y hacer una historia clínica, cónchale pero esta vez estudiare full de verdad para adelantar lo más que pueda, bueno son las 7:30 de la mañana tengo un largo día por delante, además de que mañana es día feriado, 24 de junio, bueno, será esta una jornada de estudio larga al igual que mañana. Saqué del baúl mis hojas para hacer apuntes e inicié con la jornada de estudio, estaba empezando a estudiar dolor de cabeza o cefalea como le llaman en el campo médico, no había hecho apuntes ni siquiera de la mitad de una hoja tamaño carta cuando me llego un mensaje al teléfono. Seguro es uno de esos mensajes de movistar invitándome a pagar la renta o de promociones-pensé- sin embargo decidí ver el mensaje inmediatamente, quien sabe lo que podía ser, siempre tenemos esa interrogante al recibir un mensaje de texto, antes era con cartas físicas que hacían a la desesperación más dramática, ahora con los mensajes de texto telefónicos es todo más rápido, pero la angustia sigue, puede ser el peor mensaje que recibas en toda tu vida, puede ser el mejor mensaje del día que termina alegrándote por completo, puede ser un mensaje de tu madre para avistarte que montes una olla con arroz para el almuerzo o una pasta, también puede ser el mensaje de texto de una mujer que tus latidos acelera y que te hace pensar miles de respuestas, ah bueno, también puede ser un mensaje de texto de movistar recordándote que debes pagar o un mensaje de un candidato político arrodillándose suplicándote que votes por el en las elecciones que vienen. Solo sé que la de montar el arroz no podía ser, era muy temprano todavía. Revisé entonces y me encontré con lo siguiente: Martes 7:54am Henry: ¿Miguel, activo para Chuao? Mira nos suspendieron el quiz aquí en el hospital, saldremos más temprano. ¿Si puedes verdad? Comenzó una guerra en mi mente sobre si tenía el dinero suficiente para viajar a Chuao, no me podía perder este viaje, no me lo perdí. Con recortadísimo presupuesto decidí emprender el viaje, viaje en el tiempo, viaje en el mar, viaje de risas y experiencias únicas. Abandoné todos los libros y las responsabilidades que demanda la universidad para ahora aprender aquello que no enseñan en ningún lugar, ni siquiera esos conferencistas exitosos de excelentes trajes por los que pagas un dineral para ir a escucharles hablar sobre como podrías hacer de tu vida un éxito, bueno para empezar yo te diría que si quieres ser exitoso no deberías gastar todo ese dinero en conferencias, no es de personas exitosas, bueno creo yo. Los hombres nacieron para ser felices, ese objetivo se ha ido perdiendo, ahora preguntas objetivos de vida y escuchas “Graduarme de…” “Ser el mejor en…” “Tener una familia” “Casarme” “Tener mi propio negocio” “Tener mucho dinero”. Bueno no gastes tu dinero en conferencias ni libros amigo, mi recomendación es que viajes, no te cobraré por ese consejo. Arreglé mi mochila corriendo de lado a lado en el apartamento tratando de asegurarme que no me faltara nada, prepare unas arepas rellenas de caraotas para compartir con Henry y Gustavo y bueno partí a casa de Gustavo donde nos encontraríamos. Tuve la mala fortuna de pescar una alergia de esas que hacen que no dejes de estornudar y moquear todo el día, en el camino a casa de Gustavo decidí sacar un poco de papel toilette para limpiarme de un estornudo tremendo y un señor al verme sacar el rollo de papel en medio de la Avenida Bolívar me pregunta: ¿Chamo vas a hacer aquí en la calle? Bueno me sequé la nariz y seguí, llegué a casa de Gustavo y allí estaban Henry y Gustavo hablando con Perozo, el vigilante del edificio donde vive la familia Celis Pacheco, la familia de Gustavo. Allí me aclararon que Andrea nos acompañaría en esta ocasión. Una excelente familia nos acompañaría también, el padre de una amiga de Gustavo y su hija, el señor Eduardo y Luisana, personas que están muy claras sobre donde se encuentra la felicidad. Visitaríamos entonces el pueblo de Chuao, me aclararon Gustavo y Henry. La idea era conocer las celebraciones que se realizan allí el día de San Juan Bautista, asunto que les estaré contando más adelante, la verdad yo no tenía idea de cómo se celebraba, ni de la historia del santo. Le pregunté por mensaje de texto a Oriana una gran amiga de la universidad si sabía algo sobre aquella festividad y bueno me aclaró algunas cosas sobre como lo celebraban en Galicia, según, debíamos saltar una fogata para tener protección todo el año, beber la queimada, una bebida que bueno…aguardiente con frutas, entre otras cosas que bueno me pusieron un poco en alerta sobre la celebración. ¿Qué pasaría allí entonces? Solo sabía de Chuao lo siguiente: Es una playa que se encuentra cerca de Choroní en el estado Aragua, no sé si al este o al oeste y que allí cultivaban cacao, pero más nada sabía.
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AuthorMúsico, Escritor y estudiante En prensa:
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